Al quedarnos embarazadas muchas mujeres nos preguntamos si mantener relaciones sexuales puede dañar a nuestro futuro hijo. Puedes estar tranquila ya que, el coito no es peligroso para el feto.
“El bebé está perfectamente protegido por las paredes del útero y por el líquido amniótico. Por otra parte, las contracciones que se producen al tener un orgasmo son tan pequeñas que, a no ser que se trate de un embarazo de riesgo y el ginecólogo haya contraindicado el sexo, no afectan al bienestar del feto.
Elena Neila, especialista en fisioterapia ginecológica de valle36
Eso sí, hay que saber que durante estos 9 meses el apetito sexual puede ir teniendo altibajos. Durante el primer trimestre, lo más normal es que no se tengan ganas de mantener relaciones.
“Tu cuerpo empieza a experimentar los primeros cambios y las hormonas harán que en algunos momentos te sientas como en una montaña rusa: náuseas, cambios de humor…
Elena Neila, especialista en fisioterapia ginecológica de valle36.
Vamos, que si estás en este momento lo más probable es que sólo busques que te mimen así que… ¡aprovéchate!
En el segundo trimestre la cosa cambia. El cuerpo ya se ha acostumbrado a los cambios, el feto se ha asentado en el útero y gran parte de los malestares del trimestre anterior han desaparecido. De ahí que lo más frecuente es que aumente la libido y, con ella, las ganas de mantener relaciones sexuales.
“Sin lugar a duda, siempre que te encuentres bien, el embarazo es un buen momento para redescubrir vuestro cuerpo en pareja, ya que tendréis que buscar las posiciones que mejor se adapten al momento de gestación en el que os encontréis, siempre evitando presionar el útero.
Elena Neila, especialista en fisioterapia ginecológica de valle36
En los últimos meses, la tripa adquiere un gran tamaño. Si se le suman los nervios que se suelen tener por la proximidad del parto, algo habitual es que vuelvan a disminuir las ganas de sexo. ¡Normal! Es momento de relajarse y esperar a que llegue el peque ;)