Como todos sabemos, durante el embarazo debemos llevar una dieta variada y equilibrada. Sin embargo, con la llegada de la Navidad resulta una misión muy difícil… y comienzan los excesos y las dudas sobre lo que debemos/podemos comer , sobre todo, lo que es recomendable evitar.
Así que… Nos hemos puesto manos a la obra para reunir en este post unos pequeños consejos sobre alimentos muy comunes en Navidad y que, quizás, deberías sustituir.
Un claro ejemplo es el marisco. Pese a que existe un importante debate respecto a este tema, para no correr riesgos, lo mejor es que no abuses del mismo, eso sí, siempre que esté bien cocido, ya que el marisco crudo puede transmitir anisakis.
Vamos a complicar el tema… ;) ¿Qué pasa con los alimentos ahumados o marinados (salmón, bacalao, trucha…), en vinagre (boquerones) o los salazones (mojama, anchoas, arenque…), tan frecuentes en las mesas de Navidad? Pues muy a nuestro pesar, durante el embarazo no debes tomar este tipo de alimentos, ya que se trata de comida no cocinada y puedes correr el riesgo de contraer toxoplasmosis, listerioris o anisakis. Pero tranquila, ¡hay una excepción! Hoy en día, puedes encontrar en supermercados este tipo de productos enlatados o envasados que señalan específicamente estar exentos de este tipo de riesgos :)
Otro alimento habitual de los aperitivos en esta época es el queso. Algunos de estos productos están elaborados con leche no pasteurizada, por lo sería recomendable que la embarazada los evitara por riesgo de listeriosis. ¿Un ejemplo? El feta, Brie, Camembert, azul, Cabrales o roquefort. Pero con la cantidad de quesos que hay, seguro que encuentras uno delicioso que puedas comer sin problemas :).
Y ahora… un clásico…¡El jamón serrano! al igual que otros embutidos, como el chorizo, el salchichón o el lomo, se elaboran a partir de carne cruda, por lo que no deben tomarse durante el embarazo por riesgo de toxoplasmosis. Si, lo sabemos, es una tentación muuuyy grande ;) Aunque algunos ginecólogos afirman que comer un buen jamón ibérico de bellota no es peligroso y que, congelarlo previamente a una temperatura muy baja durante varios días tampoco. Estas dos opciones están en tu mano…
¿Y qué pasa con los platos preparados con carne o pescado crudo (carpaccio, tartar, ceviche,etc.) Para evitar riesgos de sufrir alguna infección alimentaria que pueda afectar al feto, es mejor que si estás embarazada, no comas este tipo de alimentos. De hecho, en el caso del pescado azul deberás abstenerte de tomar aquellos que son de gran tamaño (pez espada, atún rojo, y lucio) debido a la cantidad de mercurio que contienen.
¡Pero no todo está perdido! Podrás darte un capricho con los dulces navideños (a no ser que tengas una dieta específica). Eso sí, siempre con moderación para evitar que aparezcan esos kilitos de más :)
Y para ponértelo aún más fácil, te dejamos un menú navideño ideal para el embarazo, es decir, riquísimo y muy sano para tí y para tu bebé. ¿Te animas a probarlo? :)