Much@s mamás y papás nos preguntáis cuál es la mejor edad para enseñar a vuestro peque a nadar. Nosotros pensamos que cuanto antes, mejor. Es decir, cuanto más pequeño es el bebé, mejor se adaptará al medio acuático. No olvidemos que se ha pasado 9 meses flotando en el líquido amniótico en el útero.
A partir de los 4 meses, que el bebé ya tiene las primeras vacunas puestas, y siempre y cuando el pediatra no vea problema alguno, podremos empezar con la matronatación y la estimulación acuática de nuestro bebé. De esta forma, los peques perderán el miedo al agua y comenzarán a disfrutar como pequeños peces..
“Lo que queremos en estos primeros años no es que aprendan a nadar sino que los bebés, junto a sus padres, se estimulen en el agua con ejercicios guiados por las instrucciones de un monitor cualificado.”
Esther Maeso, fisioterapeuta especialista en Matronatación y Natación de valle36.
A partir de los 4 años es cuando se recomienda que los niños comiencen ya las clases de natación como tal. A esta edad sus músculos se han desarrollado y coordinan sus movimientos de forma adecuada para comenzar poco a poco a aprender los diferentes estilos para nadar mediante pequeños juegos en la piscina.
“Al inicio, más que una práctica deportiva debemos entender la natación como una actividad recreativa. No preparamos a los niños para ser nadadores de élite, sino que lo que pretendemos es que el pequeño vaya adquiriendo los movimientos como si de un juego se tratara.”
Esther Maeso, fisioterapeuta especialista en Matronatación y Natación de valle36.
Eso sí, preguntad siempre en el centro al que vayáis cómo cuidan su piscina. La piel de los peques es muy fina y sensible, por lo que nunca hay que tratarla con químicos dañinos para la dermis. Nosotros, por ejemplo, limpiamos nuestra piscina con oxígeno y luz ultravioleta. ¡Nada de cloro! Así nos aseguramos que la piel de nuestros niños seguirá siempre suave ;) y sin problemas.