Termina el año y hay que poner en práctica nuestros buenos propósitos para el 2016: comer mejor, ponerse en forma, perder esos kilitos de más… ¿Os suena esta historia?
Todos los años tenemos nuestra lista pero…¿luego cuántos cumplimos? Empezamos con muchas ganas pero a medida que avanza el año van desapareciendo poco a poco las fuerzas ¿verdad? ;) ¡Os ayudamos a conseguirlo con algunos consejos!
Fundamental: El objetivo debe ser siempre realista, para que podamos llegar a conseguirlo. Ponerse en forma es el propósito estrella de todos los años, pero no vale cualquier actividad. Elige siempre una actividad que te motive y haga disfrutar. De esta forma, poco a poco, acostumbras a tu cuerpo y acabarás por convertirlo en una necesidad.
Dicen los psicólogos que la clave está en “21 días”, ya que es el tiempo que necesita nuestro cerebro para asimilar algo como un hábito. ¡Así que ya sabes! Un pequeño esfuerzo inicial….¡y ya lo tienes! Eso si, ve siempre poco a poco para que el cuerpo se acostumbre. ¡Nada de meterse palizas!
Compartir propósitos también es una buena idea. Cuando se trata de ir a un gimnasio, muchas veces nos da pereza ir sólos. Pero si vamos con nuestra pareja o una amiga…¡motivación compartida! Así tiraremos el uno del otro y no habrá excusas ;P
Y por último, tómate el propósito como un estilo de vida y no como una obligación. Ten claro a dónde quieres llegar y, siempre, piensa en los beneficios que te va a reportar. ¡Verás como éste 2016 los propósitos sí se consiguen!