Llega un momento en la mujer en el que tenemos que enfrentarnos a una etapa un tanto delicada y, por qué no decirlo, temida por la gran mayoría de nosotras…La menopausia.Quizás sea porque lo hemos identificado como un signo de “hacerse mayor”, lo cual nos hace taparnos los oídos cada vez que escuchamos esa palabra. Pero… ¿Y si nos lo tomamos con otra actitud? Es decir, ¿No sería mejor coger las riendas para evitar caer en la desesperación?
Tampoco es obligatorio ponernos en plan “alegría de la huerta” por tener la menopausia, pero lo que sí podemos hacer es poner en práctica algunos cuidados básicos para que los síntomas de esta etapa nos afecten lo menos posible :)
Entonces, ¿Qué debemos hacer?
En primer lugar, por no decir de lo más importante, es nuestra alimentación.
Durante la menopausia, el cambio hormonal provoca una tendencia a aumentar el peso y a padecer osteoporosis. Por ello, se recomienda tomar una dieta baja en grasas y rica en calcio, así como en vitamina D para facilitar su absorción.
Por otro lado es muy aconsejable añadir a nuestra alimentación productos que contengan Omega 3, como el pescado azul, germen de trigo, nueces, etc., ya que os ayudan a mantener unos niveles saludables de colesterol y triglicéridos.
Otro alimento del que no debemos olvidarnos es la soja, la cual es bien conocida por su aporte de isoflavonas que nos ayudan a regular nuestro equilibrio hormonal.
Además de llevar una dieta equilibrada, también tenemos la opción de los suplementos nutricionales, como el aceite de onagra, borraja, o lino. Este tipo de productos son muy interesantes ya que nos aportan fitoestrógenos y ácidos grasos esenciales, los cuales nos ayudarán a aliviar muchos de los síntomas que podemos sufrir durante esta etapa.
Y si ya queremos sacar matrícula de honor, habrá que despedirnos de ciertos hábitos como tomar café, tabaco o alcohol. ¿Por qué? Por la sencilla razón de que se aumentan los sofocos y el riesgo de padecer osteoporosis y enfermedades cardiovasculares. Así que habrá que hacer un “pequeño esfuerzo” y reducir estas dosis lo máximo posible ;)
Y ahora…¡Un poco de ejercicio!
Se trata de una de las mejores maneras para mantener en forma nuestros huesos, músculos, articulaciones, sistema cardiovascular….Vamos, ¡Todo! :) Y es que no hay mejor aliado que el deporte para sentirnos sanos, fuertes y llenos de vitalidad. Eso sí, siempre con un nivel adaptado a cada uno de nosotros. Así que ya sabéis…¡Sin prisa pero sin pausa!
Mimando nuestro suelo pélvico
Durante la menopausia sufrimos una carencia hormonal que favorece la aparición de la famosa incontinencia urinaria y el prolapso genital, sobre todo en mujeres que han tenido hijos. ¿Debemos preocuparnos? No :) Hoy en día existen muchas técnicas para prevenir y tratar este tipo de problemas. Por ello, es fundamental acudir a especialistas para que puedan valorar nuestro caso y ayudarnos a resolverlo mediante ejercicios específicos para fortalecer el suelo pélvico.
La piel…Siempre protegida
Los cambios hormonales que se producen durante la menopausia también puede afectar a nuestra piel. ¿Cómo? Podemos sentirla más deshidratada, menos elástica y con poca luz. Por ello, se recomienda cuidarla con cremas hidratantes ricas en vitaminas y antioxidantes.
Una vida sexual plena
Es cierto que la disminución de los niveles de estrógeno pueden incluir sequedad vaginal y disminución de la libido. Pero, ¿Por qué tiene que ser esto un impedimento para disfrutar con nuestra pareja? Hoy en día existen multitud de productos que nos ayudan a que estos problemas se esfumen, como los lubricantes, los juguetes eróticos y, como no, nuestra imaginación. Y es que durante esta etapa es fundamental mantener esa chispa para que la relación no caiga en la rutina y para que nuestra autoestima se mantenga en lo más alto. Además…Hay que aprovechar que ya no hay riesgo de quedarnos embarazadas, ¿O no? ;)
Siempre… Una buena actitud
Es muy importante que la mujer afronte este periodo con una actitud fuerte y positiva. La menopausia no significa que debamos entrar en depresión. ¡Al contrario! Comienza una nueva etapa en la que tenemos la madurez y la experiencia necesaria (y nos sobra) para comernos el mundo :)
Así que no dudes en estar preparada, no porque se acerque una tormenta, sino porque empieza un nuevo capítulo lleno de nuevas experiencias y buenos momentos… Y claro, habrá que aprovecharlos al máximo llenas de energía y vitalidad, ¿No creeis? :)