La llegada del calor se nota… y nuestro cuerpo nos pide que le cuidemos más, ahora que las altas temperaturas hacen mella. Pero, ¿por qué ocurre esto? Se debe, principalmente, a que generamos más sudor que en invierno…Y como nuestro organismo es muy sabio, nos pide a modo de “sed” que compensemos esa pérdida de líquido extra. Pero, ¿valen todas las bebidas? En realidad resuelve cualquier líquido pero, ahora bien, no todas tienen la misma eficacia ni las mismas propiedades… Por ello, en este post te dejamos algunas de las opciones más beneficiosas para que elijas la que más te gusta :)
¡A hidratarnos se ha dicho!
El agua. Todo un clásico…¿Sabías que nuestro cuerpo contiene más de un 50% de este elemento? De ahí a que se considere la bebida más sana para nuestro organismo. Vamos, que no puede faltar para conseguir una hidratación óptima y mantenernos saludables. Podemos tomarla sola o a modo de té o infusión. Además, ahora que ha llegado el calorcito, puedes preparate “aguas afrutadas”, una opción ligera, refrescante y riquísima. Unos ejemplos que salen buenísimos son: piña y naranja, pomelo y arándanos, uva y kiwi con un toque de canela… En resumen, bueno, bonito y sanísimo ;)
Batidos naturales. Hoy en día se conocen como “smoothies”. Una solución refrescante y nutritiva perfecta para combatir el calor. Además de hidratarnos, nos aportan vitaminas, minerales y energía. Los podemos hacer de fruta, verdura… ¡O todo junto!. Como están tan de moda, podemos encontrar muchísimas recetas con propiedades diferentes en cualquier revista o en internet. Y si queremos hacerlo más fresquito, añadimos un poco de hielo picado y listo :) ¿Ejemplos? Batido de zanahoria y naranja, de fresa y plátano, de piña y jengibre, de frutos rojos y remolacha…¡Y muchísimos más!
Limonada. Suena simple, pero resulta una de las bebidas más recurrentes del verano. ¿Será por sus propiedades depurativas y desintoxicantes? Además es muy rica en vitamina C. Uno de los casos en los que más se aconseja esta bebida es tras hacer deporte. Ya que, ¡atentos! si le añadimos media cucharadita de bicarbonato, se convierte en una bebida isotónica natural perfecta para reponer líquido y electrolitos después de un esfuerzo físico.
Eso sí, ¡No hay que pasarse con el azúcar! ;)
Horchata. Otra bebida natural y muy sabrosa. Se obtiene de la chufa, un tubérculo con un sabor muy especial. Pero, ¿qué propiedades nos aporta? Resulta que es rica en hidratos de carbono, convirtiéndola en fuente de energía perfecta para cualquier momento del día y para cualquier persona, en especial niños, deportistas y personas mayores.
Además es rica en minerales (como el fósforo, magnesio, hierro y calcio) y en vitaminas (principalmente C y E), convirtiéndola en un buen aliado para disminuir los niveles de colesterol malo.
Gazpacho. La “fría por excelencia”. Un plato típico español que se ha popularizado debido, no sólo a su delicioso y refrescante sabor, sino a sus múltiples propiedades.Y no es para menos, ya que está elaborado a base de hortalizas, convirtiéndolo en una bomba de vitaminas, antioxidantes y minerales. Vamos, todo un reconstituyente para nuestro cuerpo…¡Y bajo en grasa!. Así que, no dudéis en poner esta bebida en vuestra lista de “indispensables” para este verano… Eso sí, ojito con barquitos de pan, que nos conocemos ;)
Refrescos. Si, lo sabemos, están muy buenos y tienen un alto contenido en agua. Sin embargo, su aporte nutricional es prácticamente nulo, además de llevar bastante azúcar. Por tanto, vamos a intentar evitarlos en la medida de lo posible con el fin de seguir una dieta sana y equilibrada. Además, teniendo todas las opciones anteriores, no hay excusa que valga.
Recuerda que el objetivo es mantenernos hidratados, sin olvidar de protegernos frente al sol… Pero si además de esto podemos divertirnos preparando bebidas sanas y nutritivas, ¡mejor que mejor